10 red flags que te indican que no tienes un buen jefe

Cuando un candidato hace su entrevista de trabajo, la respuesta a la pregunta "¿Por qué dejó su empleo anterior? suele ser: "No tenía oportunidades de desarrollo", o "el ingreso no alcanzaba para cubrir mis necesidades"; pero la realidad es diferente. Recientes encuestas marcan que la principal causa para que la gente deje sus trabajos es el jefe que tienen. Ni siquiera un mal salario o las pocas oportunidades de desarrollo.

Quiero ser claro: Un mal jefe no sólo significa mucha rotación. Un mal jefe le hace la vida miserable a sus colaboradores. Circunstancia que afecta tanto su vida laboral como la personal.

Esta pieza está pensada en dos sentidos: si usted está cargo de una empresa y notra que alguno de sus gerentes tiene estas actitudes, es tiempo de actuar. Probablemente sólo se trata que no ha tenido la capacitación gerencial o directiva necesaria; probablemente se trate de una persona que por inseguridad le gusta humillar y hacer presente su reelevancia ante los demás... o se trata de problemas psicológicos o psiquiátricos graves, que necesitan atención y acción inmediata.

Hay quer aclarar que muchos de nosotros hemos tenido alguna de las actitudes que mencionaremos adelante; pero, mientras más actitudes encuentre en una persona, más tóxico será el ambiente de trabajo.

1. Nunca elogia los progresos de su gente. Dice cosas como: “para eso se les paga”, y además “luego se malacostumbran”. 

2. Una frase que repite con cierta frecuencia, sobre todo si alguien cuestiona cierta decisión o acción o si está en desacuerdo: “si no estás de acuerdo, las puertas están abiertas, al fin y al cabo, otros tienen necesidad del puesto”.

3. Nunca se interesa por los problemas personales de sus subordinados, “los problemas de casa, se dejan en casa”. 

4. Una constante en el día a día:  “¡Todo urge!" y piensa que sólo así la gente entregará su trabajo a tiempo. Lo que en realidad termina ocurriendo es que la gente empieza a actuar con cínismo: "Ya sabes  siempre le urge y ni es cierto"

5. Cuando hay oportunidad de promover a otra área u otro puesto. Nunca propone al mejor personal que está bajo sus órdenes, y si alguien le cuestiona, dice: “¿De qué manera sacaré adelante mi trabajo?”

6. Regaña en público a su personal. Y no sólo llama la atención, monta un teatro, con gritos incluidos.

7. Nunca le da la tarde libre o un permiso a algún subalterno. “es necesario producir más y hay mucho trabajo que hacer”.

8. Cuando alguien termina su trabajo antes de la hora, “lo estimula para que haga otra cosa”. Faltando cinco minutos para finalizar la jornada, usualmente pide que haga un trabajo muy urgente. No se siente jefe, se siente dueño del tiempo de la gente que trabaja para él. Los horarios no existen.

9. Busca siempre su conveniencia, retractándose muy seguido de las órdenes que imparte. Habla de valores morales, pero que su vida diaria es lo contrario de lo que predica. Da contraórdenes continuamente.

10. Padece "juntitis". Hace la mayor cantidad de juntas posibles, y mientras más tarde mejor. Piensa que controla  a su personal por medio de juntas largas.

Si piensa en su vida laboral, seguramente le han aplicado algunas de éstas. Y muy probablemente también usted ha aplicado otras tantas. No se sienta mal. Son errores comunes; pero si encuentra a alguien que aplica todas o la gran mayoría de estas, no tenga duda; es un jefe tóxico que hace la vida miserable de sus colaboradores.