El simplismo en las redes: Un ejemplo

 

Hace unos días vi una publicación en Facebook que lleva unos años circulando. La publicación dice: Estaría padre un reality show donde pongan a cinco ricos a vivir con el salario mínimo en algún rincón del Edomex. El primero en hacer un millón de pesos en seis meses gana. El programa se llamaría “pobre es pobre porque quiere’.” Me parece que el que creó esta publicación, y los que la difunden, no entienden que no entienden.

Dejemos de lado la desafortunada parte de “el pobre es pobre porque quiere”, atribuida al infame engañabobos que le robó sus sacos al difunto Tío Gamboín, Carlos Muñoz. La parte que me interesa es la de poner a cinco ricos a vivir con el salario mínimo.

La idea atrás de esta publicación implicaría que estos “ricos” no saldrían de su estado de pobreza gracias a la escasez del salario mínimo.

Aquel que dice que “el pobre sólo es pobre porque quiere” no entiende la realidad económica y social o es incapaz de salirse de su particular mundillo. No obstante, no es imposible salir de la pobreza en este país. Yo particularmente conozco un par de casos admirables de gente y que incluso, uno de ellos, tenía que caminar 5 kilómetros diarios para ir a la escuela en la sierra, y después hacer malabares para poder culminar una licenciatura. Luego, tuvieron la constancia y sagacidad necesaria para triunfar en sus respectivos campos. Pero también hay que decir que no tendría que ser tan difícil. Es injusto que para algunos sectores de la sociedad sea tremendamente difícil obtener una educación de calidad, en todos los niveles educativos. El gobierno y la sociedad civil han fallado en sus estrategias para llevar una educación de calidad a los que menos tienen. La herramienta más valiosa para garantizar la equidad social es el acceso a la educación.

Por otro lado, también hay que decir que, mucho antes de los 6 meses, ya había quien hubiera hecho el millón de pesos, y más que eso.

Para empezar, si existiera ese famoso reality, yo iría a buscar a uno de esos ricos y le daría, no sólo el salario mínimo, sino una participación como socio en mi empresa. Y me parece que habría que hacer fila.

La publicación deja de lado el valor del saber hacer negocios, la experiencia y las relaciones que son muy importantes para desarrollar una empresa.

Cuando la persona dirige una empresa, tiene un set de conocimientos invaluables. El Know how en el mundo empresarial es muy valioso para diferenciarse de sus competidores y tener éxito en los negocios.

Las relaciones sociales también resultan de gran valor para generar dinero, ya que ayudan a las empresas a establecer contactos y conexiones valiosas que pueden llevar a las empresas a establecer nuevas oportunidades de negocio. La idea de ir a eventos de cámaras empresariales, eventos políticos o sociales, incluso a conferencias o inscribirse a ciertos clubs sociales es el de establecer relaciones que después serán muy beneficiosas para los negocios. En mi experiencia personal, un buen contacto en el lugar correcto es invaluable.

La experiencia es un factor importante para la generación del dinero, ya que las personas con experiencia en un campo en particular tienen habilidades y conocimientos valiosos que pueden ser oro molido para aquel con la visión suficiente para aprovecharlos y sacar provecho de ellos.

Con esto no quiero decir que ya por el hecho de ser rico ya tienes estas ventajas. Si en ese reality hubiera un típico junior, aparte, medio estúpido e insoportable, no creo que obtuviera muchas propuestas de alianza o sociedad. Pero, aquel que ha estado al frente de una empresa, que ha llegado a grandes niveles de generación de negocio, no le faltarían ofertas como la que mencioné anteriormente.

También es un hecho que, si se les diera un millón de pesos a 5 personas sacadas al azar de alguna colonia popular, en seis meses más de la mitad no lo hubieran podido traducir a una mejora real en sus vidas.

En alguna ocasión, un empresario de la industria de la construcción se quejaba de su marmolero, porque no lo podía encontrar por ningún lado. El tipo se llevaba, hace 20 años, 80 mil pesos al mes. El problema es que, después de pagarle, no era raro que se desapareciera por 15 días sólo para regresar, sin un peso en la bolsa, a pedir un adelanto para darle de comer a su familia.

No es raro ver en las redes sociales publicaciones falsas, o simplistas; pero el problema es ver que la gente se las cree y no ve más allá de la pantalla. Por eso estamos como estamos.